Los ángeles son seres muy delicados. Pueden estar a nuestros alrededor sin ser conscientes de ello. Mira bien cerca de ti, quizás no te has percatado aún de su presencia.
No lo descubrirás por sus alas. Son invisibles para los ojos mortales. Fíjate bien, en algunos detalles, la humildad y la sencillez con que realiza cada uno de sus actos. Sobre todo la luz que desprenden sus palabras, bálsamo para las heridas y las llagas más profundas del alma. Todo ello al ser desinteresado, porque sale directamente de sus bondadoso corazón, sin esperar nada a cambio, desprende la magia como las más hermosas estrellas del firmamento.
¿Crees que puedes tener un ángel cercad de ti?. Observa bien, quizás llegues a darte cuenta que siempre ha estado a tu lado.
Si algún día descubres un ángel, no intentes atraparlo, ni encerrarlo en una jaula, aunque esta sea del más maravilloso metal conocido. Estos seres alados son de una sensibilidad exquisita. Si les despojas de su libertad, pierden toda la magia.
Creo que siempre hay alguno cerca y tú dejas pistas para reconocerlos, ellos hablan con amor y sus palabras son dulces. Una suerte el saber distinguirlos al lado.
ResponderEliminarUn tierno y hermoso texto, amiga.
¡Un fuerte abrazo!!
Si amiga, están a nuestro lado. A veces ni siquiera nos percatamos de ello. En mi vida he tenido la suerte de tropezar con varios. Aparecen en momento puntuales. Después marchan, cuando se ha cumplido aquello por lo que aparecieron. Reparte amor y esperanza, también nos enseñan aquello que no podemos ver por nosotros mismos. Un abrazo inmenso. Muchas gracias y feliz semana.
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