Quizás sólo es la melancolía del otoño
con sus días pintados de gris y ese vuelo
de hojas ocres y amarillas que me llegan
a lo más profundo del alma,
quizás sólo sea eso...
Mi cuerpo cansado de batallas,
mi alma demasiado volátil para
soportar tanto peso, se revela y mira
al cielo...
Cuantas noches y cuantos días
se quedaron atrás
chapoteando en el tejado
de los recuerdos...
Lágrimas y sonrisas, tristes
y bellos momentos...
Dios sigue en el cielo...
Pero no lo vemos...
el cielo está dentro de mi alma
y también está el infierno...
Todos llevamos dentro
del alma infierno y cielo...
La hojas siguen volando
en torbellinos ocres,
ellas vuelan en silencio.
Una gota gris se desliza,
alguien llora en el infierno,
alguien ora en el cielo
Dios sigue en silencio,
los ángeles están cerca...
Pero no los vemos...
Los demonios todo
lo cubren de ceniza y fuego,
Alguien llora en el infierno.
alguien ora en el cielo...
Dios está cerca...
Pero no lo vemos...
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