En la mitología de griega, Selene está representada por una bella mujer de piel pálida y aterciopelada, que lleva sobre la cabeza una corona con media luna y cubre su bello cuerpo con una túnica sedosa y blanca. En su delicada mano lleva una antorcha para iluminar toda a tierra. La bella diosa todas las noches se desplaza por el cielo en su carruaje de plata, tirado por dos caballos alados. Selene es la diosa de la noche. La diosa Luna.
La misión de al hermosa Selene es que nunca falte luz a los mortales, cuando el Dios sol se oculta en el horizonte.
Los que hoy os relato es la gran historia de amor entre una diosa y un mortal y como el amor siempre es posible cuando surge del alma y del corazón como la más pura y delicada azucena.
El gran amor de Selene fue Endimión. Uno de los hombres más bellos que existían en el mundo. Un joven pastor que cuidaba sus rebaños todos los días con esmero y dedicación. Y ocurrió en una ocasión que mientras el muchacho estaba recostado sobre un árbol, esperando a que su ganado acabará de pastar , quedó profundamente dormido. Y así llegó la noche sin que el joven despertará de aquel profundo sueño.
Fue entonces cuando Selene entre las estrellas observó al pastor profundamente dormido.
La diosa descendió de las alturas para poder ver más de cerca y detenidamente al joven.
Al momento quedó prendada de la belleza del muchacho y profundamente enamorada.
Y cada noche Selene regresaba al lado de su amado. El joven no era conscientes de aquel bello amor y cuando despertaba por las mañanas, creía que todo era un bello sueño, producto de su imaginación.
Pero un día al descender la diosa para volver al lado de su amado, era tanta la emoción al encontrarse de nuevo con él, que su corazón nacarado latió con más fuerza que de costumbre y todo el paraje se ilumino con el brillo maravilloso de los latidos de su amor y Endimión abrió los ojos y despertó.
En el mismo instante en que se encontraron sus miradas quedaron profundamente enamorados el uno del otro.
Pero los separaba sus condición. Mientras Selene era una diosa, Endimión sólo era un mortal.
Los dos jóvenes se amaban profundamente con toda su alma y corazón y no querían renunciar a su amor. Así que la diosa buscón una solución para permanecer juntos por siempre y no separarse jamás. Pidió a Zeus que le concediera a Endimión la juventud eterna y que le hicieran dormir durante todos los días de su vida y sólo lo despertará de noche para reunirse con ella. Zeus acepto la petición de la diosa y Endimión cayó en un profundo sueño del que sólo despertaba en las noches para recibir a su amada entre sus brazos.
De esta forma Selene y Endimión permanecen a lo largo de todos los tiempo en un rincón recóndito del mundo, ignorado por los mortales, profesándose su gran amor eternamente.
Para el verdadero amor no existen barreras que lo pueda separar. Porque el amor tiene alas infinitas para poder sobrevolar y sortear cualquier obstáculo que se le pueda presentar. Esta es la historia de dos amantes que lo tenían todo en su contra y que a pesar de ello lucharon por su amor y por seguir juntos. Porque el verdadero amor busca la forma de sobrevivir a pesar de todas las dificultades que se puedan presentar. Las dificultades cuanto más grandes son más lo fortalecen y más vida le dan, aprende a luchar y a sortear cualquier obstáculo.
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jueves, 18 de febrero de 2021
Leyenda de amor entre la luna y el mortal Endimión
lunes, 15 de febrero de 2021
feliz y lindo martes. Buenos días con cariño para ti

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martes, 2 de febrero de 2021
San Valentín "Poema para mi amor"
El mejor momento
de mi vida,
el mejor momento
de mi existir
fue cuando tu alma
y la mía se encontraron
y nuestros corazones
se unieron
en un mismo latir.
Ese día iniciamos
el camino de la vida
tu y yo
con nuestras manos
unidas y dos corazones
en un mismo corazón
Se quedan cortas las palabras
En el jardín del amor
para expresar lo mucho
que te quiero corazón
Hay amores que nunca lo fueron
amores de paso,
amores como una bonita flor
amores que no son amores,
amores sin alma ni corazón
Y hay amores como el tuyo y el mío,
amores sagrados,
amores en completa comunión.
Más que ayer y menos que mañana
en las buenas y en las malas,
con esta frase
nuestro amor se engalana.
Porque tú eres el amor
de mi vida,
mi ilusión, mi sueño,
mi alegría
y mi mejor momento.
Juntos mi amor
día a día
compartiendo
nuestro amor,
nuestras ilusiones,
sueños y momentos.
Tú, solamente tú
has sabido ver mi alma
y amarla tal y como es.
Gracias mi amor
por cada minuto,
por cada día
y por cada amanecer.
Me enseñaste
el cielo a descubrir
y me mostraste
lo bonita que es la vida
y lo bonito que es vivir.
Gracias por tu alma hermosa
y por tu forma de ser.
Y cuando cuando llegue
nuestro último viaje,
y nos reclamen allá
en el Universo,
a lo más divino ruego
tus manos entre las mías
y nuestro corazones
juntos latiendo.
Desde la tierra hasta el cielo
desde el cielo y más allá
nuestro amor siempre unido
en esta vida
y por toda la eternidad

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