Buenos días
en esta mañana de viernes,
con alegría y agradecimiento
a Dios por un día más de vida.
Sonríe y se feliz y no te enojes
por esas cosas que no puedes
cambiar.
Hay cosas que no dependen
de nosotros,
ni nos corresponde cambiarlas.
Nunca pierdas tu vida,
tu calma, tu paz interior.
Porque ellas son la esencia
de tu alma.
Sin ellas nada puede
existir.
Demos gracias por cada
bocanada de aire y por cada
segundo de vida.
El viaje de la vida no es fácil,
pero tenemos el privilegio
de ser pasajeros de este tren.
Busca la esencia del amor
en las pequeñas cosas
de la vida.
Fíjate en esa lágrima
tan salada y minúscula,
contiene el corazón
de una persona.
Agradece el haberte
dado cuenta de que el vaso
se ha desbordado con la última
gota.
Da gracias porque ahora
eres consciente
de que necesitas un gran
cambio en tu vida.
Los cambios no son fáciles
y a veces pueden doler
demasiado.
Fíjate en la mariposa,
tuvo que atravesar la noche
más oscura, para poder
desplegar las alas
sobre el cielo azul.
No esperes siempre
un final feliz.
Hay finales que pueden doler
demasiado,
pero son finales necesarios
en nuestra
vida, para poder
seguir avanzando y creciendo
como seres humanos.
Te deseo un viernes
y fin de semana maravillosos
llenos de paz, amor y mucha
felicidad.
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