Buenos días ¿cómo está?
Quizás...¿nos conocemos?
¿por qué será que mi alma
quiere recordar?
pero lo impiden
mis pensamientos.
Lejos, lejos, muy lejos
allá en otros tiempos
lejanos tiempos
Una mujer envuelta
en un velo,
como la noche negro,
de bronce y talle
de sol y fuego
Baila una extraña danza.
Y todos se oscurece
y el cielo se vuelve negro
a su lado una doncella
sobre una pesada piedra
atada de pies y manos
la contempla entre llantos
y la punta de sus dedos
toca el calor de otro cuerpo
el cuerpo de su amado
de su amor eterno
mientras una rosa de sangre
se abre en el centro de su
pecho.
Una daga de plata brilla
y se alza bajo el cielo
En la oscura noche
un grito suena
antes del eterno silencio,
antes de expirar,
ella susurra con su último
aliento,
Espérame mi amor,
porque en otra vida
nos encontraremos
mi amado amor
mi amor eterno.
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