Nuestro mundo, nuestro planeta azul, sólo es un puntito diminuto en el Universo. Pero nuestro planeta es la vida para todos nosotros. Hemos nacido aquí y esta es nuestra hábitat natural.
Desgraciadamente se está extinguiendo poco a poco.
¿Qué ocurre con nuestro mundo?
¿No lo hemos cuidado lo suficiente?
Los humanos somos tan tremendamente complicados que destruimos nuestro propia hábitat natural,
cosa que no haría ningún animal a pesar no tener inteligencia humana ni capacidad para razonar.
Amigos el Egoísmo es un monstruo muy adictivo y es la madre de todas las bajas pasiones que viven en el corazón humano, de la codicia, de la envidia, del odio y de un largo etcétera
Cuando un ser humano se contamina con el Egoísmo, sólo existe él en el mundo y su propio capricho y bienestar a costa de lo que sea.
Se convierte en un tremendo vendaval capaz de llevarse por delante y arrasar cualquier cosa para lograr y obtener sus deseos.
Así somos los humanos. Llevamos dentro las dos caras de la moneda: El bien y el mal.
Todos estamos expuestos a esas dos caras, pero somos nosotros los que giramos la moneda hacia una u otra cara, en un momento dado.
Todos tenemos elección, pero el Egoísmo siempre esta esperando la oportunidad de meterse dentro del corazón humano.
Para musitarnos al oído: Mientras que tú vivas bien, que no te importen los demás. Primero has de ser tú, después has de ser tú y siempre has de ser tú.
Que tristeza amigos con lo cortita que es la vida y cuanto daño se puede hacer en esa corta existencia.
Con lo sencillo que es hacer el bien y sembrar rosas en nuestro camino en vez de espinas.
El egoísmo amigos es ciego y sordo y cuando se apodera del corazón de un ser humano no le deja ver ni oír nada que no sea su propio bienestar y beneficio.
¿ Pueden cambiar los seres humanos? La respuesta es Sí
¿Podemos salvar nuestro mundo y a nosotros mismos? La respuesta es Sí
¿Cómo podemos hacerlo?
Mirando a nuestro alrededor, apartando la mirada de nuestro propio Ego y mirando a nuestro alrededor. Pero no miremos con los ojos de siempre. Miremos con los ojos del alma porque sólo con ellos podemos ver la realidad y después amigos míos no permitamos que hagan ni hagamos a nadie lo que no nos gustaría que nos hicieran a nosotros.
¿Podemos cambiar nuestro mundo? Yo creo firmemente que sí amigos y que el cambio está en nosotros mismos.
Con todo mi cariño les deseo a todo un feliz año nuevo 2020
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